C a r l e s   R i b a

En las alturas de Barcelona, un sótano se había convertido en un espacio desaprovechado cuyo uso principal era el de trastero. El objetivo del encargo era hacer renacer ese espacio, crear un lugar agradable y cómodo orientado a la sala de juegos de los niños, pero también dotarle la posibilidad de convertirlo en un espacio para invitados.

El proyecto consistió en aprovechar y restaurar mobiliario en desuso, como la mesa Subeybaja de Santa & Cole, la lámpara TMM de Miguel Milá, la lámpara Cordech o la alfombra Frank Lloyd con la combinación de elementos nuevos. Se ordenaron los espacios para crear un dormitorio para invitados con una cama corrida, y una sala de estar en la que se tapizó el sofá para aportar vivacidad y color. Ambas salas, se comunican mediante una puerta corredera para poder diferenciarlas y dar privacidad. El resultado es una sala de estar acogedora para que los niños de la casa puedan jugar y reunirse con sus amigos y una habitación que, en caso de tener invitados, se puede extender para que los huéspedes tengan una sala privada.

En colaboración con Kalimba Studio
Fotografía Meritxell Arjalaguer

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